Entradas

Mostrando entradas de noviembre, 2020

No

Cara a cara tus palabras ingenuas, aparentemente inocuas, tu mirada no sospecha lo que la mía tan desesperadamente intenta chillar. Perdona, no me puedo quedar más, ¿No ves que me estoy llorando? Pero lo hago, las palabras no me rescatan y me quedo, y me aguanto, y la sal se convierte en ácido que me hace doler las heridas que nunca cerraron, y el dolor emponzoñado me envenena las entrañas y embota el aire que entra en mis pulmones. Quiero correr hasta sudar esta pena y chillar hasta ahuyentarla. Quiero derramarla fuera, huir hasta que me pierda la pista. Yo bien, ¿Tú? ¿Qué? Lo siento, no te estaba escuchando ¿No ves que me estoy llorando? Agnes Hightopp

Demasiado

Y si es demasiado tarde. Y si ya no hay ninguna posibilidad de llevar una vida plenamente feliz. Ni funcional. Y si estoy demasiado rota para la única vida que merece la pena. Y si es demasiado tarde. Y si estoy demasiado rota. Y si jamás me vuelvo a ir en paz a la cama. Y jamás me vuelvo a levantar descansada. Y si ninguna de las voces que hay en mi cabeza son ya yo. Y si me obligan a hacer cosas que no quiero. Y si ya no quiero nada. Y si es demasiado tarde. Y si estoy demasiado rota. Y si esta presión en el pecho no desaparece nunca y mis bocanadas jamás se vuelven a sentir llenas. Y si la empatía no vuelve. Y si el desahogo y el conocimiento y el reconocimiento ya no son suficiente. Y si es demasiado tarde. Y si estoy demasiado rota. Y si ningún abrazo llega suficientemente dentro. Y si se ha congelado. Y si se ha esparcido y cristalizado entre mis huesos y tendones y emociones y al final acaba ganando porque pincha demasiado. Y si es demasiado tarde. Demasiado. Demasiado. Agnes Hi