Pinceladas

Pinceladas

Se levantó, se sentó en la mesa y encendió la luz. 
Comenzó entonces a imaginar las sombras de los edificios que antes había dibujado, causadas por el sol de la mañana, y trazó sobre ellos tonos rosados y amarillos. Y entre las calles empezó a perfilar pequeñas figuras que iban y venían, que se saludaban...
Entonces algo tropezó en su mesa y el vaso de agua cayó sobre el dibujo distorsionando las líneas, emborronando los colores y cubriéndolo todo de una atmósfera gris y húmeda.
Entonces imaginó el viento sobre todo aquello y con pinceladas suaves fue creando formas en el cielo del dibujo, y algunas las perfiló sutilmente de rojo, reflejos del sol que se ocultaba por el horizonte; y cubrió los espacios en blanco con distintos tonos de azul, y sobre los más oscuros dibujó unos casi imperceptibles puntitos blancos. Y borró a la gente de las calles, y dibujó luces en los edificios, y encendió de naranja las farolas de esa, su ciudad.
Satisfecho sonrió y apagó la luz, ignorando que todas aquellas personas no eran conscientes de su existencia.

Agnes Hightopp

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